EFSA recomienda eliminar inspección post mortem

Eurocarne, 13/07/2012. La opinión científica hecha pública por la EFSA, disponible en la sección Documentos de eurocarnedigital, estima que la modernización de la inspección en mataderos de aves tiene que producirse basándose en el riesgo de las prácticas y mediante la mejora del uso de la información de la cadena alimentaria que deben compartir los criadores de aves con los mataderos. Mediante esta información se consigue tipificar a las exp lotaciones de cría así como mejorar la sanidad animal y el bienestar animal.

La EFSA encuentra que es vital identificar la presencia de posibles riesgos de toxiinfecciones tales como Campylobacter, Salmonella o las cefalosporinasas dentro de los mataderos. Con tal fin, la EFSA recomienda la mejora de los sistemas actuales mediante la introducción de un sistema que incremente la seguridad alimentaria con objetivos claros a cumplir en el control de las canales de aves y también en las explotaciones avícolas.

También describe una serie de medidas de control que están disponibles actualmente y recomienda el uso de la información de la cadena alimentaria transmitida entre la granja y el matadero con el fin de poder categorizar el riesgo de las explotaciones avícolas y clasificar los mataderos según su capacidad de reducir la contaminación de las canales de aves.

En cuanto al bienestar y la sanidad animal, la EFSA entiende que la inspección en mataderos es una excelente herramienta para conocer más sobre estos aspectos. La EFSA recomienda eliminar inspección post mortem pero recomienda la puesta en marcha de otros sistemas que puedan ayudar a completar la información referente a las posibles enfermedades que han tenido los animales o las condiciones de bienestar animal que han tenido. En este aspecto, la información de la cadena alimentaria puede ser una herramienta útil, en parte, según la EFSA.

Respecto a los contaminantes que puedan entrar en contacto con la carne de aves, tales como dioxinas, antibióticos, nitrofuranos, etc, con el fin de controlar su presencia en las aves y en su carne, la EFSA recomienda la toma de muestras en las canales, como base para la información de la cadena alimentaria, haciendo más controles en aquellas canales procedentes de animales criados en granjas de riesgo. También recomienda la puesta en marcha de controles de residuos y contaminantes en los que se incluyan nuevas sustancias.